Hoy mas que nunca quisiera creer que es cierta esa teoría de los multiversos o universos paralelos que concibe que puedan existir diferentes realidades desarrollándose al mismo tiempo, a través de distintas líneas de espacio-tiempo bifurcándose en un universo infinito que se expande eternamente.
Si eso fuera cierto, en este momento probablemente pudiera estar transcurriendo con toda normalidad, otra realidad en la que no estuviéramos atravesando por este torbellino de sentimientos y emociones que nos embargan.
Otra realidad en la que nada de lo que estamos viviendo, estuviera pasando y las personas que aún deberían estar con nosotros, continuarían con su vida, con sus planes y luchando por sus sueños.
Una realidad en la que Barbara prosigue con su vida, con sus estudios y con sus proyectos, viviendo todas esas experiencias que le correspondían vivir y no entendemos porque no lo esta haciendo.
Una realidad en la que mi hermana no sufre ese desgarrador dolor que nada podemos hacer por apaciguar.
Una realidad en la que mi cuñado y mi sobrino no tienen que lidiar con ese inmenso vacío que ha dejado su ausencia.
Una realidad en la que todos quienes la queremos y extrañamos, podamos verla crecer y evolucionar para convertirse en esa espectacular mujer, autentica y emprendedora que desde siempre mostró que iba a ser.